como estallido interno me rompe en soledad,
no piensas en el cuerpo y sólo ves el alma
volando en la bruma, desnuda en libertad.
La ausencia un mal del hombre, un reto de la muerte,
olvido del tiempo, temor de su acabar;
nostalgia de los astros en llanto y vacío
amarga existencia, dolor es su orfandad.
Me tienen los siglos llenando la cabeza
memoria de la vida, anales de un pasar;
el rapto de la muerte, un nuevo nacimiento,
renuncia dolorosa al nuevo despertar.
La pena ya se curva sobre los recuerdos
mientras pasa el tiempo como agua por mis pies;
amores que he abrazado, un trébol de esperanza,
bajo el sol su hálito se llena de mi ser.
A. Elisa Lattke V.
Los recuerdos siempre pesan y algunos hasta hacen daño, pero así es la vida y debemos aceptarlo.
ResponderEliminarUn abrazo y lindo día.