Estáis y se agradece

2/3/11

Vivencias


Se agradece a la vida pero... 
Últimamente no soy más que un verso,   
cúmulo de palabras de un destino 
para el atrio del templo matutino 
donde imploro limosna a mi regreso.  
Soy gris atardecer difuminado 
barrido por el viento hacia mi ocaso; 
treinta monedas dadas por un beso 
con el dolor de Cristo en el tropiezo, 
entendiendo dolor de otro fracaso.

Piel humana, tejido de la vida, 
un saco de neuronas que protestan; 
agitación interior en los que orquestan 
ser víctimas propicias de su herida.  
Vivencias en los huesos de la tierra 
cargando la de otros, su miseria; 
contrarios a mi fe son de su histeria 
el polvo que respiro y que me encierra.   
...
Y dónde quedo yo, cuando pregunto 
... a mi abúlica rosa ya marchita, 
¡por qué su espina en quien me necesita,  
sin darme una razón... de perro mundo! 

Elisa
2011

2 comentarios:

  1. Es eso el Hombre, quizás, mucho y poco; humus y pulso de estrellas.
    La virtud estelar está en esos pasos que van, un poco más allá, buscando lo excelso.
    Un gusto haber pasado por tu blog.
    Gracias por tu visita a los míos.
    Un abrazo.
    Juan.
    http://remerofantasmal.blogspot.com/2010/11/luz-y-sombra-sombra-y-luz.html

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  2. Gracias Juan por tu visita

    Una está aquí para algo, pero debe hallar siempre el motivo y cuando así es sigue siempre buscando; unas veces porque entiende de qué va y otras porque entendiéndolo aún no resuelve 'la jugada'. El tiempo es la basa en contra o a favor, pero se duda mover antes la ficha ante el mejor adversario, que nos sonríe recordándonos nuestra pequeñez humana. Somos muy vulnerables en sus manos.

    Un saludo. Elisa.

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¡Gracias por tu visita! Se sincero siempre no necesitas para ello excederte, sólo estimular a quien lo hace bien. Juzga la labor tanto si es escrita como si es un dibujo o pintura de su autora si la hubiese. Muchas veces entramos a un sitio y no hallamos lo que queremos... Es como quien busca sin suerte y entra en un castillo cuya figura se yergue en el paisaje. Es hermoso ver e imaginar detrás de sus muros lo que hay; pero ya dentro no existe nada y todo ha desaparecido a través del tiempo y se adueña el cacío, están sólo sus muros llenos de tristeza y de sombras, entonces nos queda la imaginación para sentir que cada día mientras esté de pie la luz solar o el firmamento lo llenará de estrellas o de luna de su ayer. A veces somos así algunos seres humanos, como un recuerdo que se escapa dentro de nosotros hacia lo que no existe bajo su techo y sabe permanecer en el corazón de todo universo. Ranita.